-PNV Y PSE se ponen de acuerdo en recortes sociales y en ayudar a los empresarios para que eleven sus beneficios.
-Recortan, sin embargo, a políticas sociales y no quieren mejorar los salarios a los malpagados pensionistas.
Hace unos días el presidente de Confebask, Roberto Larrañaga, reclamó que "la fiscalidad revierta más en las empresas mediante ayudas a la inversión o al empleo". El nuevo presidente de los empresarios vascos ha cambiado el discurso de su antecesor Miguel Ángel Lujua, que estaba empeñado en convencernos de que los empresarios vascos pagaban más impuestos que los alemanes, para reivindicar una bajada de los mismos. No pudo con el engaño.
En este momento, Larrañaga avanza por otro flanco ante la debilidad y sumisión de los gobernantes vascos: quiere más subvenciones y afirma que el Impuesto de Sociedades en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se encuentra en el 28% y en el Estado español desde 2016 en el 25%.
Pero Roberto Larrañaga, sin embargo, oculta dos datos, entre otros, que muestran un fuerte desequilibrio en la balanza. Uno, muy importante: sólo tres de cada diez empresarios paga el impuesto de sociedades, y lo hacen a un tipo efectivo que no supera el 16%, es decir 12 puntos por debajo de lo que marca la ley. Y, además, las grandes compañías lo hacen a no más del 6% por los sistemas de elusión fiscal que aplican a sus cuentas, muchas de ellas opacas en sus sedes de paraísos fiscales.
Otra, la segunda, es que en cuatro años (2013-2016) la élite económica y los empresarios han obtenido el perdón de las arcas públicas, por los denominados beneficios fiscales, por un valor, según el presupuesto presentado por el Gobierno Vasco, de 2.165 millones en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, justo cuando los beneficios empresariales se han incrementado debido a la reducción de costes por los despidos que se han aplicado y que han adelgazado las plantillas, los bajos salarios que se pagan por la elevada precariedad y la congelación de la negociación colectiva para evitar que los trabajadores eleven su poder adquisitivo.
TRABAJADORES DECLARAN EL DOBLE QUE EMPRESARIOS.
De hecho, los informes de las haciendas forales confirman que los trabajadores declaran unos ingresos casi el doble que los empresarios y las actividades profesionales. Se repite casa año, pero los poderes públicos no reaccionan.
Por lo tanto, como dijo el catedrático de Administración Pública Ignacio Zubiri "pagan poco o nada" y, sin embargo, quieren más subvenciones, que se niegan a los pensionistas con salarios por debajo de los mil euros o a quienes se encuentran en la pobreza y la exclusión social, a quienes se les recortó el presupuesto y no vuelve a equilibrarse, desde el Gobierno de Patxi López al Gobierno de Iñigo Urkullu. PNV y PSE(PSOE) se ponen de acuerdo en reducir el gasto en apoyo a los más necesitados, pero benefician a la élite económica y empresarial con los impuestos y con los presupuestos.
EN 2016, 559 MILLONES MENOS
Con los presupuestos de 2016 del Gobierno Vasco, aprobados recientemente, muestran que en 2016 en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa los empresarios no pagarán por los denominados beneficios fiscales, por el Impuesto de Sociedades y el de Patrimonio, un total de 559 millones que es una cantidad superior a las políticas sociales para los afectados por la pobreza y la exclusión (516 millones), o los 338 millones de políticas activas de empleo (de las que también se benefician los empresarios por crear empleo precario), o los 198 millones para la incentivación de empleo de Lanbide, o los del presupuesto del Departamento de Desarrollo Económico y Competitividad, o los de política de vivienda (Visesa, Alokabide...) con 191,7 millones.
"AL SERVICIO DE LOS EMPRESARIOS"
La economista Nekane Jurado señala en su análisis de los presupuestos de 2016 que "la Administración está al servicio de los empresarios". Recuerda que "la recaudación por el Impuesto de Sociedades ha descendido en Hego Euskal Herria el 45,8% desde 2008 hasta 2016, siendo remarcable el descenso en Nafarroa que se sitúa en el 60%. Esto ha sido, en mayor medida, por la bajada de los tipos -que según los políticos no iba a suponer menos recaudación en este impuesto-, y por el fraude fiscal que se está consolidando; y en una parte menor por la bajada de la actividad económica".
Con los últimos datos cerrados de las haciendas forales, "el número de empresas que declara Base Liquidable negativa (que no paga impuestos) supone ya el 70,7% del total de empresas". Jurado añade que la recaudación presupuestada por el Impuesto de Sociedades en Hego Euskal Herria ha pasado de los 2.591,8 millones de 2008 a los 1.404,4 millones de 2016.
Termina criticando "la sumisión al empresariado vasco" y remarca que "los beneficios de las empresas constituyen mucho más de la mitad de la riqueza generada (PIB), aumentando cada año su disparidad con las rentas salariales, la última bajada del Impuesto de Sociedades, y el aumento de los beneficios fiscales hace que de cada 100 euros que se espera recaudar en 2016 en Hego Euskal Herria solamente 8,3 euros serán pagados por las empresas, frente al 14,45 de 2008".
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