lunes, 31 de agosto de 2015

El incremento salarial más bajo de los últimos 16 años, según Eurofound



Un estudio de Eurofound confirma que en 2013 y 2014 los incrementos de los salarios en la negociación colectiva del Estado español son los más bajos de los ultimo 16 años, sin embargo en Alemania crecieron en 2014 por encima de 1999. 

Eurofound, Fundación Europea para la Mejora de las Condiciones de Vida y del Trabajo, Eurofound,confirma que en la Unión Europea los empresarios mantienen una estrategia conjunta de debilitar los salarios de los trabajadores. En el Estado español esa posición es exagerada. El incremento salarial medio pactado estuvo a la cola de la UE (0,57%) -2,72% en 1999-, aunque si se mide en paridad de compra llega al 0,8%, igualando a algunos países europeos. En Alemania los salarios crecieron un 3,10%, casi seis veces más que en el Estado español, por encima del 3% que lo hicieron en 1999.

En 2014 cayeron o se mantuvieron sobre 2013 en la mayoría de países. Sin embargo, la Comisión Europea ha generado un espejismo al permitir que sea el Banco Central Europeo el que inyecte miles de millones al sistema financiero para contener o reducir la inflación, lo que genera un pequeñísimo avance sobre los salarios, si se mide en paridad de compra. 

La realidad, aunque Eurofound (conocida por Fundación Dublín) no lo explica, es que este recorte generalizado de salarios en la UE ha conducido a un incremento espectacular de las ganancias de la elite económica y empresarial. Es decir, se está empobreciendo a la clase trabajadora -mucho más en algunos estados, como el español- para permitir que unos pocos acaparen mayor riqueza.

En conjunto, como explica la Fundación Dublín,  en 2014 se acordó salario nominal "igual o inferior en casi todos los países encuestados en 2014 en comparación con 2013". Sin embargo, la inflación más baja durante el mismo período dio lugar a aumentos en salarios acordados en negociación colectiva, "lo que confirma el retorno del crecimiento en términos reales que había comenzado en 2013", explica, pero que es fruto de esa intervención para reducir la inflación de manera artificial por las inyecciones económicas súperextraordinarias del Banco Central Europeo (BCE). 


Eurofound ha informado sobre la evolución de salario acordado colectivo en toda Europa de forma continua durante casi dos décadas. 

Catorce países han aportado información concreta para la investigación. Estas son las conclusiones de Eurofound: 
-"En ocho de los 14 países incluidos en el informe, los aumentos nominales de 2014 fueron menores que en 2013".
-"Cuatro países registraron aumentos similares en ambos años".
-"Alemania y Gran Bretaña fueron los únicos países que notificaron un aumento considerablemente mayor en 2014 que en 2013, con aumentos de salarios que crecen en 0,4 puntos porcentuales y 0,5 puntos, respectivamente".
-"En muchos países, los aumentos nominales después de 2010 tienden a ser más bajos que en el período anterior".
-"Para el período comprendido entre 2012 y 2014, los aumentos salariales acordados colectivamente tienden a reducirse en 10 de los 14 países". 
-"En términos reales, 12 países reportaron incrementos positivos de los salarios reales en 2014".
-"Finlandia fue el único país donde el crecimiento salarial acordado colectivamente no logró mantenerse al día con el crecimiento de los precios".


Nota:
Tabla1 es el incremento salarial pactado 
Tabla 2 es el incremento salarial medido según el efecto de la inflación.

El cáncer de mama y el trabajo: datos abrumadores en un informe de Estados Unidos

El Fondo de Cáncer de Mama de Estados Unidos acaba de publicar en agosto un informe que contiene evidencia irrefutable sobre la función de las condiciones de trabajo en los cánceres de mama. 

Sobre la base de un cuidadoso análisis de la literatura científica más reciente, el informe confirma las asociaciones previamente observadas entre diferentes profesiones y los cánceres de mama:
-Entre las enfermeras, el riesgo se incrementa en un 50%. Se cuadruplicó en ocupaciones cualificadas.
-El riesgo de cáncer de mama se ha multiplicado por cinco en el campo de la peluquería y la cosmética, así como entre los trabajadores de la industria alimentaria. 
-Se multiplica por 4,5 entre los trabajadores de limpieza en seco y lavandería. 
-Se cuadruplicó entre el funcionamiento de las fábricas de papel y artes gráficas, así como en la fabricación de productos de caucho y plástico. 

El informe enumera los riesgos laborales que explican estas cifras. Esto es principalmente un conjunto de productos químicos como el benceno y otros solventes, hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP), pesticidas y muchos otros disruptores endocrinos. 

También culpa al trabajo nocturno y la radiación ionizante como causas de cáncer de mama. 
En Europa, según datos de 2012, se registraron más de 350.000 casos nuevos de cáncer de mama y la mortalidad ha superado los 90.000 personas. 

La gran mayoría de los cánceres de mama afectan a las mujeres. Entre las mujeres, es la principal causa de mortalidad por cáncer. 
En diferentes países de Europa, la incidencia de estos cánceres está aumentando claramente. Laurent Vogel, investigador de ETUI (instituto sindical europeo), explica que el estudio confirma que la deficiencia prevención en el lugar de trabajo contribuye de manera significativa al aumento de los cánceres. "Estamos siendo testigos de los últimos diez años a la obstrucción de las políticas comunitarias de salud ocupacional. Esta situación aumenta las desigualdades sociales en salud. En cuanto a los cánceres de mama que son cánceres dependientes de hormonas, la pasividad de la Comisión Europea contra el problema de los alteradores endocrinos y su subordinación a los grupos de presión industriales ayuda a impedir la prevención eficaz en el lugar de trabajo", dijo.




sábado, 29 de agosto de 2015

El negocio de las pensiones, para el capital financiero




El pasado, presente y futuro de las pensiones públicas genera siempre un fuerte y encendido debate. La razón es que quienes nos gobiernan han fijado unas reglas para que las pensiones sean, en general, más bajas y de miseria, y quienes están al acecho, es decir los bancos y fondos de pensiones, pesquen en este río revuelto que les brindan los gobernantes.

Dos datos evidentes: 38 de cada 100 pensionistas vascos cobra por debajo del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que, además, esta muy alejado del umbral de la pobreza para Hego Euskal Herria. Y, por otro lado, el capital financiero durante la crisis económica ha conseguido atraer a su ventanilla un 28,76% más  de fondos económicos para pensiones privadas hasta alcanzar un récord en junio de 2015 de los 102.471,5 millones. Es el punto más elevado desde 1998, cuando entran de lleno en el mercado.

El deterioro de las condiciones de trabajo con la elevada precariedad, que ha propiciado el Gobierno español, una veces por el PP y otras por el PSOE, han hecho que las cotizaciones sociales estén cayendo de forma espectacular porque se beneficia a los empresarios. En realidad, se busca reducir los costes laborales para ganar competitividad de forma artificial, unido a la bajada de los sueldos. 
A la vez, las haciendas permiten reducir el pago de impuestos a quienes abren o mantienen los fondos de pensiones privados, en vez de impulsar un empleo de calidad que cotice de manera adecuada para garantizar las pensiones públicas. 
Este tema tiene enormes aristas desde donde analizar, pero está cada vez mas claro que la garantía de las pensiones públicas es una necesidad de voluntad política, más que económica, que también, pero por esa deriva a favor de los empresarios y el capital que nuestros gobernantes han ofrecido con las nuevas leyes incorporadas en los últimos años.

DATOS SORPRENDENTES: Los fondos de inversión colectiva y de pensiones a junio de este año alcanzan la cifra récord de 471.221 millones. Ahí se encuentran las SICAV que tributan poco o nada con 35.230 millones, otros fondos de inversión e inversión inmobiliaria de extranjeros y que todos bancos tienen, incluso Kutxabank aunque en la CAV no están en vigor.
En el caso de los fondos de pensiones, hasta junio existían 102.471,5 millones, un récord desde 1998 que irrumpieron. Desde el inicio de la crisis en 2008 han recogido casi 23.000 millones más, un 28,76% por encima, Derivado del efecto del miedo que gobiernos y empresarios están introduciendo sobre el futuro de las pensiones, mientras no hacen nada para garantizarlo. Es decir, se está favoreciendo, una vez mas, al capital financiero en vez de las personas. Es lamentable.

PENSIONES DE POBREZA. Los cambios en el sistema de Seguridad Social han disparado que muchas personas anticipen su marcha del mercado laboral, lo que está provocando que las pensiones de estos últimos sea altas y estén elevando la media, aunque una parte importante de la población recibe pensiones de miseria.

Algunos datos extraídos de las estadísticas oficiales de la Seguridad Social. Corresponden al mes de julio.
-En Hego Euskal Herria existen 660.008 pensionistas.
-251.783 pensionistas cobran por debajo de los 700 euros al mes. Es decir, el 38,15% de esta población. El Salario a Mínimo Interprofesional está establecido en 756 euros al mes (en doce pagas), y está alejado del umbral de la pobreza establecido en Hego Euskkal Herria, en torno a los 940 euros.
-369.170 pensionistas cobran por debajo de 1.000 euros al mes, es decir el 54%.

VIUDAS Y JUBILADOS POBRES. Analizando estos datos por cada tipo de pensión se extraen consecuencias en muchos casos dramáticas. Porque nos dicen que la pensión media en Hego Euskal Herria en agosto osciló entre los 1.100 euros y 1.015 euros. Sin embargo, el 52,24% de las viudas y viudos vascos percibió por debajo de 700 euros y el 82,71% no alcanza los 1.000 euros al mes.
Otro drama se encuentra en las pensiones de jubilación, cuya media es de las más altas del Estado españo, pero al desgranar los datos vemos que están generando pobreza entre muchas personas que han estado cotizando por encima de 40 años. De hecho, hay 419.064 personas con pensiones por jubilación en Hego Euskal Herria, pero de ellos casi uno de cada tres (31,15%), 130.529 personas, cobran por debajo de los 700 euros, y el 44,16% de estos pensionistas no sobrepasan la barrera de los 1.000 euros al mes. 

La realidad muestra un drama importante para los pensionistas actuales, pero el incierto camino que está dibujado puede poner las cosas mucho peor si quienes nos gobiernan no dan un giro de 180 grados a sus políticas actuales, que solo benefician a la elite financiera, económica y empresarial.

Está en nuestras manos propiciar ese cambio. No esperemos, porque, en realidad, buscan que esta agresión sea irreversible para garantizar a perpetuidad esta política de empobrecimiento de la clase trabajadora, ya perjudicada por los bajos salarios y la elevada precariedad



jueves, 13 de agosto de 2015

MÁS DE 5,64 MILLONES DE EMPRESAS EUROPEAS NO REALIZAN LA EVALUACIÓN DE RIESGOS LABORALES



 Y, ¿qué pasa? Nada. Una de cada cuatro empresas de Europa, es decir mas de 5,64 millones de empresas porque estas solo son de la UE, no realiza la evaluación de riesgos laborales, lo que implica peores condiciones para sus empleados y más riesgos. ¿Qué hace la Comision Europea? Leer, igual que nosotros, las encuestas, pero mira hacia otro lado cuando debe de actuar. Y, ¿los gobiernos de cada estado que se supone que deben garantizar la seguridad y la salud de todas las personas? Lo mismo, miran a otro lado y tratan de no importunar a esos empresarios metidos en esa carrera para obtener enormes beneficios a costa de la salud de los trabajadores.

La Agencia a Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo, con sede en Bilbo, admite que en la Unión  Europea se producen al año un total de entre 159.000 a 167.000 muertes de personas, de ellas alrededor de 8.000 corresponden a accidentes de trabajo, y el resto al efecto dañino y mortal de las enfermedades profesionales -en torno a 85.000, de ellas,se deben a distintos tipos de cáncer- contraídas a lo largo de la vida laboral del trabajador ante la falta de medidas de prevención y seguridad en las empresas.

La segunda encuesta europea de empresas sobre riesgos nuevos y emergentes (ESENER-2) realizada por la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo ha visto la luz hace unas semanas ya. Entrevista a aquellos «que más saben» en materia de seguridad y salud en las empresas acerca de la manera en que se gestionan los riesgos de seguridad y salud en su lugar de trabajo, haciendo especial hincapié en los riesgos psicosociales, como el estrés laboral, la violencia y el acoso. 
Fueron un total de 49.320 empresas (de todos los sectores  y de cinco empleados (como mínimo) de 36 países: la Europa de los Veintiocho (EU-28), así como Albania, Islandia, Montenegro, la antigua República Yugoslava de Macedonia, Serbia, Turquía, Noruega y Suiza.

DESTACO tres elementos fundamentales que se extraen de la ENCUESTA EUROPEA: 

–UNA DE CADA CUATRO EMPRESAS NO HACE EVALUACIONES DE RIESGOS. 
Un  24% de las empresas no realiza evaluaciones de riesgos periódicas. Existe un incumplimiento reiterado que ni la Comisión Europea ni los gobiernos están siendo eficaces para atajar. La propia encuesta admite que son las grandes empresas las que más actúan en este campo, pero todos sabemos que 98 de cada 100 empresas son pymes. También destaca que las evaluaciones periódicas en el lugar del trabajo por el personal de la propia empresa son las más eficaces, pero en el Estado español solo representan el 11%. Está a la cola de Europa con Eslovenia, Croacia, Hungria, Montenegro y Portugal. 
 
-CONFLICTOS RELACIONALES, POSTURAS DOLOROSAS Y MOVIMIENTOS REPETITIVOS.
Se está produciendo un crecimiento continuo del sector de los servicios, por lo que los factores de riesgo identificados con mayor frecuencia son los conflictos relacionales con clientes, alumnos y pacientes (58% de las empresas de la Europa de los Veintiocho), seguidos de las posturas dolorosas o extenuantes (56%) y los movimientos repetitivos de manos y brazos (52%).
   
   El riesgo de accidentes con maquinaria o herramientas manuales es el factor más frecuente en las empresas de construcción, de gestión de residuos y de suministro de agua y electricidad (82% de las empresas del sector en la Europa de los Veintiocho), y en la agricultura, la silvicultura y la pesca (78%) y la industria manufacturera (77%).

   Los conflictos relacionales con clientes, alumnos, pacientes, etc., es riesgo más común en la educación, la sanidad y el trabajo social (75%), y en el comercio, el transporte, la hostelería y el ocio (62%). Al igual que todos los demás factores de riesgo psicosocial, son los que se observan con mayor frecuencia en la Administración Pública y en el sector de los servicios.

   Las posturas forzadas, como permanecer sentado durante largos períodos de tiempo, son los principales factores de riesgo en la Administración Pública (76%) y en los sectores de la tecnología de la información, las finanzas, el sector inmobiliario y otros servicios científico‑técnicos o personales (64%). Cabe señalar que, como es también el caso de los movimientos repetitivos de mano y brazo, se registran con frecuencia en empresas de todos los sectores, lo que confirma que los factores de riesgo de trastorno musculoesque- léticos(TME) son comunes en todas las actividades.

-POR SECTORES.
Como explica la encuesta ESENER2, si se analizan por factores de riesgo los sectores que encabezan la lista:
   La agricultura, la silvicultura y la pesca registran las cifras más altas de cinco factores de riesgo: calor, frío o falta de agua (65% de empresas del sector, en la Europa de los Veintiocho); sustancias químicas o biológicas (63 %); movimientos repetitivos de mano y brazo (63%); jornadas de trabajo prolongadas o irregulares (35%); y los riesgos de accidentes con vehículos durante la actividad laboral anteriormente mencionados (73 %). Estos resultados ponen de relieve las importantes exigencias físicas del trabajo en este sector.

   Los sectores de la construcción, la gestión de residuos y el suministro de agua y electricidad encabezan la clasificación de riesgo de accidentes con maquinaria o herramientas manuales (82%); elevación o desplazamiento de personas o cargas pesadas (71%); un mayor riesgo de resbalones, tropiezos y caídas (63%) y ruido elevado (61%). La Administración Pública y la educación, la sanidad y el trabajo social van a la cabeza en los siete factores de riesgo restantes.

   El 59% de las empresas no cuentan con un presupuesto específico anual para las medidas y los equipos de seguridad y salud adecuados para hacer frente a la  actividad laboral diaria.
  
   Otro 27% de las empresas no proporciona a jefes de equipo y personal con cargos de responsabilidad formación en materia de Seguridad y Salud en el Trabajo.  Los conflictos relacionales con clientes, pacientes alumnos, etc. (58%) y la presión temporal (43%) son los dos factores de riesgo psicosocial observados con mayor frecuencia en las empresas de la Europa de los Veintiocho.
   
   Ambos factores de riesgo tienen un perfil sectorial similar, siendo más prevalentes en el sector de la educación, la sanidad y el trabajo social y en la Administración Pública, mientras que los valores más bajos corresponden a la agricultura, la silvicultura, la pesca y la industria manufacturera. Ambos factores de riesgo aumentan con el tamaño de la empresa, pero la presión temporal de manera especial.

CONCLUSIÓN: la normativa europea sobre prevención de riesgos laborales es exhaustiva, pero décadas después de haber entrado en vigor sigue sin ser atendida por una parte importante de las empresas y quienes deben obligarles a hacerlo miran a otro lado.




domingo, 9 de agosto de 2015

Patxi Kortazar denuncia con datos reales la “mafia” que se esconde tras decisiones contra afectados por el amianto


El Equipo de  Evaluación de Incapacidades decidió por su estado medico otorgarle una incapacidad permanente en grado total en octubre de 2010 y un mes después el director de la Seguridad Social de Bizkaia le denegó y poco menos le dijo que estaba perfecto estado  de salud, mientras tiene reconocida una asbestosis, tras un proceso de placas pleurales por culpa del amianto que inhaló en Nodular Flexic de Iurreta
--------------------------
Nota: Agradezco a Patxi Kortazar su testimonio importante que sirve para poner encima de la mesa lo que ocurre entre despachos. Solo espero que su lucha y su dolor, como los de otros muchos, no caigan en saco roto. Eskerrik Aske, Patxi.
____________



Patxi Kortazar, afectado por el amianto y uno de los portavoces de la Asociación de Víctimas del Amianto de Euskadi (Asviasmie), ha roto su silencio y ha aportado pruebas que desvelan como en el plazo de un mes la Dirección Provincial de Bizkaia de la Seguridad Social cambió el dictamen de incapacitado permanente en grado de total, por las placas pleurales y posterior asbestosis de carácter profesional que padece, a denegarle esa incapacidad poco menos que diciendo que su salud es perfecta, a pesar del “daño, el dolor y los problemas de ansiedad” que sufre desde que se inició su calvario, nada más y nada menos,que en 2003. 
“Me habéis jodido la vida desde los 49 años”. Así se expresa este luchador, a las pocas semanas de haberse Prejubilados como soldador mecánico en la empresa de Iurreta, Flexic Nodular, tras 42 años cotizados a la Seguridad Social.

RECORRIDO MÉDICO.
El informe de la médica Karmele Dauposa Egaña de 2010 realiza una breve historia del recorrido médico de Patxi Kortazar. Admite las placas pleurales, la asbestosis, reconocida desde 2005, con “empeoramiento progresivo” y recuerda que debe trabajar en un puesto exento de riesgo, cosa que no se produce en la empresa de Iurreta, como también admite.
   Ante ese informe de la médico evaluadora del Equipo de Evaluación de Incapacidades de Bizkaia, su presidente, Jose Manuel Suarez Fuertes, firma el 11.10.2010 que “la calificación del trabajador como incapacitado permanente en grado de total” y advierte de que “podría ser revisada por agravación” dos años después. Sin embargo, un mes después y con el mismo informe de la evaluación médica, el director provincial de la Seguridad Social, José Félix de Jaime Arbaiza, deniega -con fecha 16.11.2010- la prestación de incapacidad permanente “por no ser constitutivas de incapacidad permanente las lesiones que padece”.

DECISIÓN FATAL. 
Ante esa situación anómala, que Patxi Kortazar se enteró después, es cuando comienza a denunciar lo que siempre denominó “mafias al servicio de las empresas y de las mutuas”. 
Los trabajadores del amianto, además de sufrir el daño que les produjo trabajar sin protección ni prevención, se enfrentan a este tipo de decisiones donde el equipo evaluadora médico propone una decisión, pero otro de mas “arriba” cambia para favorecer a las mutuas y a las empresas y perjudicar al sistema sanitario público, que es el que carga con el problema.
Patxi Kortazar lamenta esta situación que padece, pero que es muy similar a otros compañeros de lucha contra los efectos del amianto: “médicos al servicio de las empresas, de las mutuas y en contra de los afectados, que bastante tenemos con aguantar con la enfermedad que no la hemos querido”.
   En todas las entrevistas que he realizado a afectados por el amianto o a sus familiares, todos ellos siempre habían planificado su vida a  partir de su jubilación. Pertenecieron a esa generación de trabajadores que desde los catorce o quince años entraban en las empresas como aprendices e iban ascendiendo a medida que iban ganando altura física y antigüedad en la fabrica.
Todos ellos vieron la jubilación como una manera de liberación para poder hacer lo que en su vida laboral de más de cuarenta años no pudieron hacer. Sin embargo, muchos de ellos (son bastantes) no contaron con el “asesino silencioso”, como denominan al amianto, un mineral cancerígeno ante el que las empresas no protegieron a los trabajadores de sus efectos perjudiciales para la salud, hasta producir la muerte. Vidas truncadas, después de décadas trabajando en contacto con el amianto.

TERRIBLE REALIDAD. Esa terrible realidad afectó a muchos trabajadores...., pero,  a la vez, ha dejado otra terrible situación: familiares luchando por los derechos para reparar los daños de los muertos por el amianto, y otros, trabajadores vivos, luchando por conseguir unas condiciones de vida dignas ante la imprudencia de los empresarios y de las administraciones públicas al no exigir a las empresas unas condiciones de seguridad y salud adecuadas frente al mineral cancerígeno. En medio de todo este proceso se cruzan los intereses económicos de las mutuas, de la Seguridad Social y de las empresas que genera un circulo vicioso donde la vida de los trabajadores no les importa.
La vida y lucha de Patxi Kortazar es una de esas. Ha tenido la suerte de contar por escrito con los dos dictámenes que muestran lo que el siempre ha denominado “mafia” entre los actores de este círculo del mal. Se ha prejubilado de la Fundición Nodular Flesic, de Iurreta (Bizkaia). Desde 2003 lleva esta lucha para que aflore esa tragica realidad: a los trabajadores no les informaron, ni les previnieron, ni les protegieron del mineral cancerígeno, pero, una vez que se contagiaron, les están poniendo todos los obstáculos para evitar que se les reconozca la enfermedad profesional y que tengan la indemnización adecuada por la pérdida de la calidad de vida o, en muchos casos, por la muerte de sus familiares. Es así de duro.
Reclaman un Fondo de Compensación, como hay en otros países, para evitar que los afectados «tengan que luchar ante los tribunales por unas indemnizaciones, lo que supone una tortura y añadir más sufrimiento a tus problemas» y consideran que los médicos de Osakidetza y la Seguridad  Social  deberían de actuar con más rigor, porque “por la mañana están en el servicio sanitario público” y por la tarde “en el servicio privado o al servicio de una mutua. 
Patxi Kortazar, igual que otros afectados, ha comprobado como la Administración pública «cierra los ojos, enmudece y se tapa los oídos» para no escuchar las reclamaciones de los afectados. 
En 2005, la Seguridad Social le reconoció la enfermedad profesional, pero Mutualia impugnó la resolución. Desde entonces lleva una larga lucha entre juzgados y médicos. 

LOS PELOS DE PUNTA.
El testimonio de Patxi Kortazar pone los pelos de punta y es un ejemplo de por lo que pasa cualquiera de los afectados en esta batalla. «El 28 de mayo de 2003 se me realizó un reconocimiento de empresa, firmado por la médico Ana Zufía Uriarte. Ve las placas pleurales y me manda al Hospital de Galdakao el 30 de mayo. Las radiografías las entregé a Mutua Vizcaya Industrial -hoy Mutualia-, pero no le dan importancia». En 2004 y 2005 le hacen reconocimientos, pero ningún médico firma los mismos.
   En 2006, Isabel Merino Ramos dice en el informe que la auscultación pulmonar es «normal y que tengo murmullo vesicular conservado. En esas fechas -dice el afectado- Osakidetza sabía que tenía placas pleurales y asbestosis». Kortazar asegura que conociendo el origen de mi enfermedad, Mutualia «se saltó los protocolos de vigilancia del amianto, lo que es inadmisible y muy grave. Lo saben».
   En 2007, el doctor Manuel Oribe le dice que debe evitar «los riesgos directos en la manipulación de amianto, humos de soldadura metálicos, polvo, sílicie e irritantes respiratorios. Me dice que soy apto a nivel laboral con limitación para trabajos sensibles al polvo y las fibras». En 2008, Aritz Ortega Longarte firma «el mismo informe que un año antes». En 2009, la doctora Charo Alfageme «reconoce que no tengo un sitio para trabajar en la Fundición Nodular Flesic» y admite por escrito que no le practicaron las pruebas de control de amianto.

COMPARTIR MEDICO. Lo más sorprendente En esta larga y dolorosa historia, a juicio de Patxi Kortazar, es que desde 2003 a 2009 esos controles médicos los hizo Mutualia Prevención, pero «hasta el 25 de enero de 2010 no me llamó Mutualia Salud, cuando Carlos Sarabia Unibaso me da dos altas, el 14 de marzo de 2010 y el 20 de enero de 2011. No se han preocupado para más. El primer TAC que me hace Mutualia, una prueba de diagnóstico radiológica mediante la utilización de rayos X y procesamiento de las imágenes por ordenador, fue entonces, cuando en 2005 Osakidetza ya me lo hizo y demostró las placas pleurales y la asbestosis. Si no hago la prueba con Osakidetza, me muero y no sé de qué». 
Sin embargo, el afectado recuerda que el médico de familia Sarabia «tras pedirle que me envíe a un neumólogo, me remitió a la doctora Isabel Urrutia Landa, que es médico de la mutua, pero es la que me atendió en el Hospital de Galdakao. ¿Cómo puede ser que por las mañanas te atienda en el hospital público y por las tardes te atienda en la mutua, un servicio privado? ¿Cómo va a defender a los trabajadores? Es una vergüenza». Kortazar debería incorporarse al trabajo, una vez que los tribunales médicos no le quieren dar la incapacidad, pero la médica Charo Alfageme le dijo que «no puedo trabajar en las condiciones de la empresa».
   El trabajador de Fundición Nodular Flesic advierte que «todo esto es una mafia en contra del trabajador. Todavía recuerdo que en Asviamie hemos visto un parte de baja de enfermedad leve y al mes siguiente falleció por un mesotelioma».
   Esta es la historia de Patxi Kortazar. 42 años cotizando a la Seguridad Social. Afectado por el amianto en su empresa, donde ya falleció otro trabajador por el mineral cancerígeno, y ninguneado por la Seguridad Social.

jueves, 6 de agosto de 2015

515 fallecidos por mesoteliomas derivados del amianto en Hego Euskal Herria desde 1993




En 2015 son ya 10 los fallecidos por enfermedades producidas por el amianto 
 en Hego Euskal Herria.

La Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC, en sus siglas inglés) confirma de manera oficial que en Hego Euskal Herria han fallecido por diferentes tipos de mesoteliomas, derivados de la inhalación de fibras de amianto, un total de 515 personas. 
   No son todos. Esta estadística es incompleta, porque la Sanidad Pública española, vasca y navarra ocultan el impacto real del amianto en la población y, además, existen cuatro años sin datos públicos  en el informe de IARC en el ámbito de Osakidetza.
   Este es el segundo reportaje que os prometí. La realidad del sufrimiento y las muertes que ha causado la nula prevención de riesgos laborales en las empresas es extraordinaria. 

HAY CULPABLES, SÍ EN PLURAL
Pero, ¿hay culpables de tanta muerte? ¿Quién permitió y ha permitido tanta impunidad? Es evidente: quienes ocultan los datos. No son otros que la propia Administración publica que, en vez de actuar, miró y mira a otro lado, dejando a los afectados, a sus familias y a sus amigos con la única salida de ir a largos e interminables procesos judiciales. 
  Así es. No intervinieron desde quienes se supone tiene que velar por las condiciones de seguridad y salud en el trabajo. Primero, no sacando la cruda realidad a la opinión pública y desviando costes, que son atribuibles a mutuas y empresarios, a las arcas públicas. Después los propios empresarios que, sabiendo que no les ocurriría nada ante esas situaciones, prefirieron ganar dinero, en vez de gastárselo en medidas adecuadas ante el peligro del amianto o asbesto. Clave de esto es que siempre en los juicios dicen que cumplen normas preventivas, hasta que los testigos (otros trabajadores) confirman lo que ha ocurrido de forma generalizada: ni sabían del peligro del mineral cancerígeno ni se pusieron medidas de prevención y protección de la salud.
  
EXPERIMENTO. 
Un afectado ya fallecido me comentó hace años en una entrevista como en la empresa que trabajaba (Vidrala) entraban debajo del horno forrados con buzos y mantas de amianto para repararlo y mantenerlo. “Pesaban mucho y las altas temperaturas te dejaban hecho polvo” y, entonces, para hacer menos duro ese trabajo, la empresa aportó unos trajes “que no pesaban nada y nos prevenía del calor. Eran del estilo al traje de los astronautas”. Sin embargo, tenían un inconveniente: arrastrarse y golpearse en la parte del horno “a cientos de grados de calor” rasgaba los trajes con mucha facilidad. “Al final, nos dijeron que eran muy caros y su vida útil muy corta”. Se lamenta, porque el experimento duró muy poco, mientras que los trabajadores siguieron sufriendo calor, peso, incomodidad e inhalaron fibras de amianto hasta resultar afectados. 

AVARICIA EMPRESARIAL
El médico especialista y miembro de la Asociación Gallega de Víctimas del Amianto (AGAVIDA), Carlos Piñeiro, destacó en una entrevista que hice hace unos años que la población trabajadora y la sociedad en general debe sensibilizarse sobre el peligro del amianto. Porque, a su juicio, “se debe activar la presión social para conseguir que aflore el amianto y para que quienes han estado en contacto con ese mineral o tengan enfermedades por cáncer logren mejoras en la calidad de vida y en su salud”. A juicio del doctor, “el uso masivo del amianto llegó por la avaricia empresarial».
   A los trabajadores no se les informó de ese riesgo, en muchos casos mortal, aunque para beneficio de administraciones públicas y empresarios el amianto tiene una latencia que puede llegar a los 45 años. Esa dura realidad les ha permitido (en muchísimos casos) eludir la responsabilidad y enmascarar estos crímenes contra la clase trabajadora y la sociedad en general.


MUERTES HASTA 2040, O MAS.
Porque se calcula que hasta el año 2040 van a seguir las muertes. En principio, el cálculo de los expertos hablaba de unas 500.000 muertes de trabajadores expuestos al amianto en los próximos 30 años, pero esos mismos expertos ante la cruda realidad con que se están encontrando en todos los países de la UE han determinado que aumentarán en un 50%, mas o menos en 47.000 muertes al año solo en Europa.

PROHIBICIÓN TARDÍA.
En la Unión Europea, no fue hasta 1999 cuando se adoptó una directiva que prohíbe la comercialización y el uso de productos que contienen amianto, pero en el Estado español no llegó hasta 2002. Mientras tanto, “millones de trabajadores europeos fueron víctimas de las placas pleurales, asbestosis, cáncer de pulmón o mesotelioma, el cáncer infame de la pleura o el peritoneo hasta día incurable”, como reconoce el experto del Instituto Sindical Europeo (Etui), Laurent Vogel.
   Unos datos orientativas de la gravedad del problema: En 1900, se identifica la asbestosis en Londres. En 1918, compañías de seguros estadounidenses se niegan a emitir pólizas de seguro de vida para los trabajadores del asbesto.1936 Alemania incluye asbestosis en la lista de enfermedades profesionales. Italia, en 1943; Francia, en 1945; Suiza, en 1953 y Austria, en 1955.

   Se sabía el peligro que entrañan las fibras de amianto, un mineral cancerígeno, pero no se hizo nada. En el libro “The asbestos lie. The past and present of an industrial catastrophe”, elaborado por María Roselli y publicado por Etui (dependiente de la CES europea) se explica que “a finales del siglo XIX, cuando el uso industrial de la supuesta maravilla fibra comenzó, se observó en alguna ocasión que los trabajadores del asbesto estaban a menudo enfermos”. 
   Como explica Vogel, se conoce los efectos dañinos, pero el amianto se sigue produciendo y extrayendo para aplicarlo a distintos procesos  industriales. Con lo cual, lo que se ha hecho es trasladar la gravedad del problema a otros países y continentes.
   “A pesar de la catástrofe humana y social, el mineral de textura fibrosa sigue siendo extraído de minas, particularmente en Quebec, y se utiliza para hacer productos de fibrocemento para la industria de la construcción en los países emergentes como China, India y Brasil. Algunos grupos industriales sin escrúpulos siguen enriqueciéndose al estar conscientes de que sus trabajadores se desarrollarán en los próximos años de las enfermedades graves”, concluye el experto belga.
   La realidad es que debería de ser prohibido en todo el mundo y adoptar mecanismos de protección y prevención ante el amianto instalado en las empresas y en los edificios, porque, al final, todos convivimos con el problema, mientras que la administración pública mira a otro lado.

martes, 4 de agosto de 2015

EXPERTOS INTERNACIONALES CONSIDERAN QUE LAS MUERTES POR AMIANTO AUMENTARÁN UN 50% EN EUROPA, HASTA LOS 47.000 FALLECIDOS POR AÑO


(Este reportaje lo dedico de corazón a todos esos afectados por el amianto y que cada día mantienen su lucha para conseguir que se haga justicia)

Expertos en amianto confirman que en los próximos años el número de muertes relacionadas con el amianto en Europa podría alcanzar su punto máximo en 47.000 por año -un 50% más de las proyecciones habituales-, y que es el doble de las muertes por accidentes de tráfico. Ante la gravedad del problema no se está actuando desde los gobiernos con la diligencia adecuada. 
   ¿Por qué? ¿Qué intereses se esconden? ¿Por qué se ocultan los datos reales del efecto del amianto? Aunque prohibido en la UE desde 2005, el amianto “sigue presente en muchos lugares, tales como barcos, trenes, maquinaria, túneles y tuberías en redes públicas y suministro privado de agua. El amianto se utilizó ampliamente en edificios construidos entre 1961 y 1990”, como se reconoce desde Bruselas.ñ
   Este es el primero de tres reportajes que voy a ir publicando en los próximos días. En este se explica la gravedad del problema a nivel europeo y mundial; le seguirá una recopilación de los fallecidos en Hego Euskal Herria y el drama que está generando; y un tercero confirmará que hay médicos y responsables de organismos públicos que actúan en favor de los intereses de las mutuas y de las empresas, o lo que es lo mismo: en contra de quienes han sufrido y sufren las consecuencias de haber inhalado durante su vida laboral las fibras de amianto. Un mineral cancerígeno que desde el inicio del siglo pasado se sabía sus consecuencias fatales, pero ni las empresas ni los gobiernos garantizaron las medidas de prevención para evitar este daño a las personas y al propio medio ambiente.
   En junio, el Comité Económico y Social Europeo (CESE) y el Comité de las Regiones (CDCR) pidió a la Comisión Europea y a los Estados miembros de la UE establecer registros de los edificios que contienen amianto y el desarrollo de planes de acción para la retirada de amianto de forma segura. Porque, como se explicó en esa conferencia internacional, “ya sea para vivienda de interés social o el palacio real, todas las casas y todos los ciudadanos están preocupados (...) Los estudiantes y los profesores, operarios y personal de mantenimiento son parte de los nuevos grupos de riesgo y se añaden a la larga lista de los trabajadores y las personas están cada vez más amenazados por estructuras de amianto contaminados en toda Europa", denuncia el CESE (Consejo Economico y Social Europeo).  Porque, según confirmaron los expertos internacionales en esa conferencia, en los próximos años el número de muertes relacionadas con el amianto en Europa podría alcanzar su punto máximo en 47.000 por año -un 50% más de las proyecciones habituales-, y que es el doble de las muertes por accidentes de tráfico. En este caso, hay que recordar que en Hego Euskal Herria solo hay unos pocos ayuntamientos que han adoptado medidas para censar edificios con amianto y poder avanzar a su desamiantado, como ya denunció la Asociacion de Víctimas del Amianto de Euskadi (Asviamie) hace unos meses.
   Según el coponente del Dictamen sobre el amianto del CESE, Enrico Gibellieri, los Estados miembros y las instituciones europeas “deben tomar medidas ahora para prevenir esta emergente crisis sanitaria pública. Es necesario llevar a buen término los planes de acción nacionales y la Comisión Europea debería dar prioridad a su respuesta a este grave riesgo para la salud pública en todos los ámbitos políticos”. A a su juicio, “estamos hablando sobre mucho más que unos obreros tradicionalmente expuestos, ya que ahora también están expuestos los niños en nuestras escuelas, el personal de nuestros hospitales y las personas que trabajan en edificios públicos, así como cualquier persona que viva en una casa, lo que equivale a casi todos los ciudadanos”.
   Según sus cálculos, Los programas de eliminación de amianto podrían costar entre 10.000 a 15.000 millones de euros en el mayor Estado miembro. Se calcula que en Gran Bretaña solamente, más del 80% de las escuelas todavía contienen amianto. Pero, como reconocen los organismos internacionales, la magnitud de esta tragedia es enorme. La OIT calcula que anualmente fallecen en el mundo más de 100.000 personas como consecuencia de la exposición al amianto. La OMS estima que cada año se registran, únicamente en la Unión Europea, entre 20.000 y 30.000 nuevos diagnósticos de enfermedades relacionadas con el amianto y que más de 300.000 ciudadanos (más de 40.000 de ellos del Estado español) morirán de mesotelioma pleural en la UE de aquí a 2030.
   Mauro D’Attis, ponente del CDR sobre el marco estratégico de la UE en materia de salud y seguridad en el trabajo 2014-2020, lamentó el hecho de que la retirada del amianto no ocupe un lugar importante en la agenda política de la UE, haciendo hincapié en la falta de voluntad política para tratar una cuestión que provoca la muerte de miles de personas cada año. «Necesitamos un riguroso análisis de los riesgos actuales y un modelo eficaz para el registro de la presencia de amianto en los edificios», subrayó.